2ª Bandera FET de Asturias

2ª Bandera FET de Asturias

1. Antecedentes.

2. León.

3. Guadalajara

4. Teruel.

5. Levante.

6. Ebro.

7. Cataluña.

8. Ofensiva de la Victoria.

1. Antecedentes

Se organizó esta unidad con el nombre de 6ª Bandera de Asturias en agosto de 1937, siendo destacada al sector de Grado.

2. León

            El 8 de septiembre fue trasladada al frente de León para cooperar en la total ocupación de la región asturiana. Toma parte en las operaciones que dieron como resultado la conquista del puerto de San Isidro, dentro de la Agrupación Ceano (4 de octubre) y prosigue su avance en dirección a Las Felguerinas y Campo de Caso. Estas operaciones tuvieron una especial dureza en razón de lo intrincado del territorio, del temporal de lluvias y de la resistencia enemiga.

3. Guadalajara

Vencida la campaña del Norte la unidad toma la denominación de 2ª Bandera de Asturias, siendo reforzada por varias centurias de la provincia procedentes de zonas recién ocupadas. En noviembre es trasladada a Navarra y en diciembre a Guadalajara (Castilblanco de Henares), de donde parte para el frente de Teruel, pasando a la 84ª División.

4. Teruel

            Toma parte en las operaciones de Cerro Gordo en los últimos días de 1937 y ya en enero y febrero de 1938, en los combates que llevaron a la recuperación de la ciudad de Teruel.

5. Levante

            En marzo con su División, realiza la campaña de Aragón, llegando al Mar Mediterráneo en la zona de Villareal.

6. Ebro

            En julio de 1938 es enviada al Ebro. En esta batalla toma parte en la contención del enemigo y en la lenta y costosa recuperación posterior. En la contención se distingue el cabo falangista Valentín Vidaliño Couceiro, perteneciente a la 3ª Centuria. Este cabo mantuvo la resistencia de la posición que ocupaba. Herido dos veces se negó a ser evacuado. Curado en la misma trinchera y, en vista de que el fuego enemigo de armas automáticas crecía, hizo una salida armado de un fusil ametrallador, acalló dos ametralladoras enemigas y regresó a su puesto. Un cañonazo enemigo acabó con su vida en el instante en que entraba de nuevo en la posición. Le fue concedida la Medalla Militar Individual según telegrama postal del Ejército del Norte de fecha 7 de septiembre de 1938. Puede verse la O.C. en la que se confirma la concesión con fecha 9 de septiembre de 1938 (B.O. número 83).

            En la recuperación del terreno en el recodo del Ebro merece destacarse la actuación heroica del alférez capellán y un falangista, ambos en la ocupación de la cota 220 y ambos el 24 de agosto de 1938. El alférez capellán don Ramón Núñez Martín, al producirse la baja de los oficiales en el asalto a la cota 220, toma la dirección de una Centuria y, con una Bandera Nacional en las manos, se lanza al frente de sus hombres a la alambrada enemiga. Recibe sucesivamente tres impactos de bala sin dejarse evacuar, finalmente es herido grave por una granada de mano y evacuado. El impulso del alférez capellán es recogido por el falangista Alfonso Fernández Soto, el cual consigue con la Bandera Nacional en las manos, atravesar la alambrada, y a pesar de resultar herido, pone el primero el pie en el parapeto enemigo, donde muere a consecuencia de una segunda herida, sin soltar de sus manos la Bandera. Ambos, alférez capellán y falangista, fueron recompensados con la Medalla Militar Individual. El capellán según O.C. de 17 de mayo de 1939 (D.O. nº 1.423): el falangista de acuerdo con el telegrama oficial postal del Ejército del Norte, fechado el 29 de septiembre de 1938.

7. Cataluña

            La 2ª Bandera de Asturias tomó parte en la ocupación de Cataluña dentro de la 84ª División llegando hasta Figueras. Se distinguió una vez más en la liberación de unos centenares de presos mantenidos por el adversario en el monasterio de Collel (Gerona). La Bandera con otras unidades avanzó rápidamente, venciendo una serie de resistencias y, tras derrocar a los guardianes a los que hicieron 100 muertos y 600 prisioneros, liberaron a los presos el 8 de febrero. Se tenía noticias de que éstos, entre los que había cierta cantidad de jefes y oficiales nacionales, habrían de ser fusilados al amanecer.

La Milicias Nacionales (1). Rafael Casas de la Vega. Madrid. 1977. P. 506-508.